Por Redacción AGR News
agrnews1@gmail.com
En el marco de las vistas públicas sobre el caso de tarifario que lleva a cabo el Negociado de Energía de Puerto Rico (NEPR), el principal oficial financiero de LUMA Energy, Andrew Smit, ofreció un testimonio clave en el que detalló cómo la prolongada quiebra de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) y la ausencia de financiamiento adecuado han socavado la estabilidad del sistema eléctrico del país.
Durante su comparecencia, Smith subrayó que la crisis fiscal de la AEE, que se extiende por más de una década y acumula una deuda de aproximadamente 10 mil millones de dólares, ha limitado severamente el acceso a crédito y a mecanismos financieros esenciales para mantener y modernizar la red eléctrica. Esta situación, según explicó, obliga a que todas las inversiones en infraestructura deban cubrirse en su totalidad cada año, en lugar de distribuirse a largo plazo como es práctica común en otras compañías eléctricas con finanzas saludables.
Uno de los puntos más críticos de su testimonio fue la falta de reposición de la cuenta de reserva para eventos de interrupciones, una obligación establecida en el Acuerdo de Operación y Mantenimiento del sistema de transmisión y distribución. Smith indicó que, desde 2023, la AEE no ha cumplido con esta responsabilidad, lo que ha forzado a LUMA a redirigir más de 209 millones de dólares originalmente destinados a proyectos planificados, para atender emergencias e interrupciones no programadas.
“El incumplimiento de la AEE nos ha obligado a cancelar o posponer trabajos esenciales para la mejora del sistema, ya que esos fondos se han utilizado para responder a eventos como el huracán Fiona y la tormenta tropical Ernesto”, afirmó Smith. Añadió que esta situación no es típica en la industria eléctrica, donde las empresas suelen contar con fondos de reserva o líneas de crédito para manejar imprevistos.
Smith también advirtió que la falta de acceso a financiamiento ha tenido un impacto directo en los clientes. “La red opera con equipos obsoletos, mantenimiento acumulado y sin una reserva de emergencia. Esto afecta la confiabilidad del servicio y limita nuestra capacidad de respuesta”, sostuvo.
Las vistas del NEPR, que comenzaron en noviembre y se extenderán durante diciembre, buscan establecer el nivel de financiamiento necesario para realizar inversiones estratégicas que fortalezcan la red eléctrica a largo plazo. Smith enfatizó que LUMA no obtiene ganancias de las tarifas que pagan los clientes, y que todo el dinero recaudado se reinvierte en la operación y mejora del sistema.
Entre los señalamientos adicionales presentados por Smith al NEPR se destacan:
- La última vez que se financió la cuenta de reserva fue en noviembre de 2023. Desde entonces, permanece vacía.
- La AEE, al estar bajo el Título III de la Ley PROMESA, no puede emitir bonos ni acceder a líneas de crédito competitivas.
- La reducción en los fondos mensuales transferidos por la AEE a LUMA, iniciada en el primer trimestre del año fiscal 2025, ha agravado la situación de liquidez.
- Muchos componentes del sistema de transmisión y distribución han superado su vida útil, operando con tecnología obsoleta que compromete el rendimiento general.
Smith concluyó su intervención reiterando la urgencia de atender estos desafíos estructurales con inversiones responsables y sostenidas, para garantizar un servicio eléctrico confiable y resiliente para todos los clientes en Puerto Rico.











Deja un comentario